La fibrosis quística es una enfermedad genética crónica que afecta principalmente a los sistemas respiratorio y digestivo, y su diagnóstico se produce en la infancia. Mejorar la calidad de vida de los niños que viven con fibrosis quística es esencial para garantizar que puedan llevar vidas felices, saludables y productivas. En un artículo pasado del blog hablamos sobre qué era la fibrosis quística y como ayudaba la fisioterapia en estos casos. En este artículo os queremos contar qué podemos hacer en nuestro día a día para mejorar la calidad de vida de los niños con fibrosis quística.
Educar a nuestro entorno
En primer lugar, la educación es fundamental. Los padres, cuidadores y maestros deben estar informados sobre la fibrosis quística, sus síntomas, tratamientos y cuidados especiales. Esto les permitirá proporcionar un entorno de apoyo adecuado y estar alerta a cualquier signo de empeoramiento en la salud del peque. Además, es importante que los niños con fibrosis quística reciban una educación adecuada sobre su propia enfermedad para que también puedan aprender a cuidar de sí mismos a medida que crecen, ya que la esperanza de vida es cada vez mayor y necesitan ser independientes.

La alimentación es imprescindible para evitar complicaciones
La nutrición es otro aspecto crucial. Los peques con fibrosis quística no absorben los nutrientes de los alimentos correctamente, por lo que es importante mantener una dieta equilibrada y rica en vitaminas, minerales, proteínas… Esto puede requerir la supervisión de un dietista nutricionista especializado para asegurarse de que el niño reciba los nutrientes necesarios para su crecimiento y desarrollo.
La fisioterapia respiratoria es esencial para los niños con fibrosis quística
La fisioterapia infantil y el ejercicio son igualmente importantes. Los ejercicios de fisioterapia respiratoria pueden ayudar a mantener los pulmones limpios y funcionando de manera eficiente. Los niños con fibrosis quística también deberían participar en actividades físicas adecuadas a su edad y posibilidades, ya que les sirve para fortalecer su sistema respiratorio y mantenerse en forma.
Seguimiento supervisado por su pediatra
Los tratamientos médicos son una parte esencial del manejo de la fibrosis quística. Los niños con esta enfermedad suelen requerir medicamentos como antibióticos, enzimas pancreáticas y otros para controlar los síntomas y prevenir complicaciones. Es fundamental que estos tratamientos se administren de manera consistente y siguiendo las indicaciones médicas.
El apoyo psicológico es crucial para la salud emocional de los niños con fibrosis quística. La enfermedad puede ser estresante y frustrante, por lo que es esencial que los niños tengan acceso a profesionales de la salud mental que puedan ayudarlos a lidiar con la ansiedad, la depresión y las preocupaciones relacionadas con su enfermedad.

Cómo podemos ayudar en Fisiopeques a las familias que luchan contra la Fibrosis Quística
Mejorar la calidad de vida de los niños con fibrosis quística debería ser la misión principal de todas las personas que rodean a los peques que padecen la enfermedad.
La educación de su entorno, una alimentación cuidada y un seguimiento continuo por parte de su pediatra y fisioterapeuta es la clave para mejorar el día a día.
En Fisiopeques, como especialistas en fisioterapia respiratoria podemos ayudarte a través de sesiones periódicas en las que tu peque mejorará su capacidad pulmonar en un ambiente seguro y adaptado a la infancia. Pide cita y te ayudaremos desde el primer momento. Dándote el soporte que necesitas, pues para nosotras es importante que la familia también se sienta arropada en todo el proceso